Las playas de Bocas del Toro son tan hermosas que da dolor irse. Desde que uno llega siente el habiente relajado, las aguas tranquilas y cristalinas, los vistosos colores de los hoteles y las lanchas, es como haber llegado a otro mundo.
Las playas de Bocas del Toro son tan hermosas que da dolor irse. Desde que uno llega siente el habiente relajado, las aguas tranquilas y cristalinas, los vistosos colores de los hoteles y las lanchas, es como haber llegado a otro mundo.